EXPERIENCIAS EN COSTA RICA (II)

HOLA!!

Hoy cuento la segunda parte de las aventuras en Costa Rica. Es largo, pero es que este día dio mucho de sí. Merece la pena leerlo detenidamente... Además mi VM es protagonista!!

Por cierto, gracias a los que os habéis interesado por lo de la piedra. Al final se ha aplazado a Octubre. Un lio largo de explicar, aunque lo que vais a leer puede tener algo que ver.

Situación: Mi Venerable Madre (VM), Honorable Padre (HP) y Hermano Tocapelotas (HT), íbamos en el coche, un todoterreno, camino de Santa Elena, en Monteverde. Resulta que para llegar a la dichosa Sta Elena había que recorrer una carretera que... bueno, qué digo carretera, un camino de cabras que... bueno, que digo camino de cabras, las cabras van por mejores sitios... una mierda de sendero por el que había agujeros, rocas, polvo... así durante 35 kilómetros, que a 20 km/h (no se podía ir a más) nos llevaba hora y media aproximadamente.

Así que íbamos en el coche to felices. Conducía mi VM con su despapajo habitual al volante. Regateando piedras gigantes y buscando llevar las ruedas por zonas más lisas para jacer agradable la travesía. Mi VM tuvo una idea de bombero para no hacer daño a las pobres ruedas y a nuestros pobres culos, que de tanto botar teníamos un granizado ahí dentro que... Bueno, a lo que iba, como de tanto meneo mi piedra del riñón debía estar en la oreja, mi VM vio la luz: había hierba en el lado derecho de la mierda de sendero ese, así que hizo la ecuación:
HIERBA=BLANDA=NO PIEDRAS=RUEDA IRÁ MEJOR=MENOS MENEO

Como madre un 10, pero como matemática deja que desear, así que la ecuación no salió bien. Al poco de ir por la hierba oímos un golpe fuerte. O mejor dicho dos. BUM! y BUM! Paramos. Bajamos del coche y se oye un pssssssssssssssssssssssssssss sospechoso. Mi HP baja por delante mira la rueda delantera. Yo por detrás y miro la trasera. Mi VM baja por la puerta del conductor y pregunta: "¿Hemos pinchado?" Tanto mi HP como yo contestamos que sí. Habíamos pinchado dos ruedas a la vez. Nos quedamos flipaos y miramos dónde huevos habíamos metido las ruedas. Pues bien. ¿Sabéis esos canalillos que pasan por debajo de las carreteras a veces para canalizar agua cuando llueve? ¿Y que para que existan hay unos bordillos en el borde de la carretera? Pues había uno. Y como mi VM llevaba el coche por la hierba cual jamelgo desbocado... nos habíamos montado encima con las dos ruedas. Podía haber sido peor. Podñiamos haber caido a la hondonada que había al lado.

Y claro, sólo teníamos una de repuesto. Pensamos qué hacer. Miramos los móviles, que no tienen cobertura. EN ese momento un todo terreno aparece a lo lejos con dos canadienses. Cuando llegan a nuestra altura mi VM se lanza a la mierda-camino y lo para. Miran asustados a mi VM que trata de explicarles lo que pasa:
"Jelou!! you spik inglissss???"
"Yeah!!"
"Wi... wi jaf... a problem jier..."
Mi HP, profesor de inglés, decide intervenir.
"We have broken two tires..."
Tras explicarles que habíamos sido tan gilipollas de meter las ruedas ahí les pedimos que cuando llegaran a la Sta Elena de las narices avisaran a una grúa para que viniera. Nos dijeron que "yeah, no problem!!". A mi VM no le debió parecer suficiente:
"Javier, ¿y si te vas con ellos?"
"Hombre, no sé si..."
Antes de acabar la frase ya les estaba diciendo que me iba con ellos. Así que subí al coche con dinero por si acaso. Arrancamos. Empezamos a recorrer distancia dejando nuestro coche atrás. Yo veía a mi Vm, Hp y HT desaparecer atrás... me preguntaba si los volvería a ver, ¡¡¡si volvería a escribir en mi bloj!!!! ENcima aquel coche se movía como un condenado. Si en el nuestro tenía la piedra en la oreja, en este ya tenía el intestino asomando por la nariz. El viaje con ellos bien: aunque un poco rápido para ir por esos caminos...
Llegamos a un lugar que parece habitado.
"Buenas. Hemos tenido una avería y necesito ayuda."
"¿Qué les pasó?"
"Hemos pinchado dos ruedas unos kilómetros atrás".
"Yo las veo bien"
"No, es otro coche, vengo buscando ayuda. ¿Tiene ruedas?"
AL decirlo me doy cuenta de lo ridículo que suena.
"No, pero 2 kilómetros mas adelante hay un taller"

Seguimos. Llegamos al taller. Entro y les cuento lo mismo.
"... y tendrían rudas del tamaño R16?"
"Sí esas de ahí"
Me enseña dos neumáticos grandes, tipo los de los circuitos de coches.
"Qué bien -le digo- muchas gracias".
Pero él ve algo raro.
"¿Y las llantas?" me pregunta.
"Las llantas no se han roto" -le digo.
"Ya, pero si no me traes las llantas no puedes poner los neumáticos tú sólo allí".
El desgraciao tenía razón. ¿De qué me servían a mí dos neumáticos sin aire? Ahora tenía que ir a donde el coche, coger las ruedas rotas, volver, poner las nuevas, y volver a irme. Le digo resignado al del taller que llame a un taxi, porque los canadienses ya me han mandao a la mierda finamente.
Llega el taxi. Subo y vamos hacia el lugar del siniestro. De repente, cuando llevamos hechos unos kilometros, un todoterreno se atraviesa en la carretera y nos para. Baja del coche un tío y le dice a mi taxista que baje la ventanilla.
"¿Ese que llevas es Javier Garcia?"
Yo alucino, flipo, y casi se me para la patata. Un tio en un monte perdido en Costa Rica pregunta por mi.... ¿tan famoso soy? Este blog desde luego no conoce fronteras pero es increible!! EL taxista me mira, y yo le digo asustado:
"Eh... ¿si?"
El hombre misterioso habla:
"Me encontré con tu familia en la carretera, y les cambié una rueda, pero falta la otra"
Yo pensando, "¿y has venido hasta aquí a decirme eso?" Siguió hablando:
"Me dijeron que fuiste a buscar un neumático, pero me di cuenta que no llevaste la llanta"
"Ya, me he dado cuenta en el taller...¿me la trae usted?"
"No, yo solo iba a decirselo, síganme hasta el lugar donde está el coche"
Ah, muy bien... Pues nada, gracias por la información.
Le seguimos al hombre ese. Un kilometro mas tarde distingo una silueta en una curva al lado de un poste con el brazo levantado. Es... es... MI VM!!! Veo que el hombre del coche de alante la recoge. Yo no entiendo nada. Por lo visto estaba buscando cobertura...
LLegamos al coche. Vamos a cargar la rueda rota pa llevarnosla cuando aparece un coche a lo lejos. Es un coche como el nuestro. Mi VM lo para y les pedimos su rueda de repuesto pa llegar al taller y ahorrarnos viajes. Aceptan. Vamos hacia el taller el hombre raro, el taxi conmigo, mi familia detrás, y los últimos en colaborar con nuestra causa y prestarnos una rueda.
Llegamos al taller y esperamos que nos hagan la reparación. Los demás se van. Mientras, mi HT y yo pasamos hambre. Mi VM pregunta ppor el hotel, que debería estar cerca. Al parecer se llama El Sol. Pero le dicen que conocen uno que se llama Sol y Luna, y que estña al lado. Mi Vm interpreta que es ese y dice que esperemos a comer a llegar, que total ya estamos.

Arrancamos y tras preguntar un par de veces por el Sol y Luna damos con él. Es un complejo de cabañas. Mi VM se para delante pero algo no marcha:
"No, no es este" dice.
"¿Cómo que no? Pone Sol y Luna". dice mi HP perplejo.
"Ya, pero... no, no es este. No se llamaba Sol y Luna"
"¿¿¿Y por qué hemos preguntado por este???"
Mi VM se baja y va a preguntar a la recepción del Sol y Luna. Vuelve.
"No, no era este. Hay otro que se llama el Sol, que es el nuestro. Me han dicho que está mas abajo"
Nosotros flipamos por haber preguntao por el Sol y Luna sin motivo. Avanzamos. Preguntamos a una niña por El Sol.
"Sí, está unos 3 kilómetros hacia allí... tiene un sol en la fachada".
Avanzamos. Nuestra tripas hacen ruidos escandalosos y mi VM no deja de descojonarse viendo que el dichoso Sol no aparece, y el de verdad desaparece porque está anocheciendo y seguimos en medio del monte sin sitio donde dormir. Preguntamos a otra niña:
"Más arriba, junto al cementerio"
Esa respuesta nos da mal rollo, pero a mi VM le parece divertidícima y sigue descojonándose. Encontramos un taxista que nos dice que avancemos hasta pasar una escuela y una iglesia.
Avanzamos por el monte, lejos ya de Sta Elena. SIgue anocheciendo, queda poca luz. Pero mi VM sigue descojonada perdida conduciendo. De repente llegamos a un lugar donde vemos una especie de sol, echándole imaginación, junto a una valla típica de ranchos. Mi VM grita:
"Mira!!! es aquí."
Mi HP flipa: "Esto es un rancho, aquí no hay nada!!!"
Mi VM se descojona y le ordena que abra. Mi HP baja resignado y abre refunfuñado que le va a salir un toro.
Abierta la valla bajamos por un camino entre dos setos gigante que no dejan ver nada. Llegamos a un claro mas amplio pero ni rastro de civilización, sólo monte.
"Aquí no es, vamos a dar la vuelta" decide mi VM.
"Vale, pero yo voy a sacar una foto del atardecer" dice mi HT.
"Y yo a mear" dice mi HP.
Mientras tanto, mi VM y yo esperamos en el coche, mi VM todavía llorando de la risa. Mi VM mira hacia atrás al atardecer y yo hacia adelante cuando veo una aparición. Del seto que hay delante del coche sale una mujer enorme vestida con una especie de túnica roja, una cinta en la frente, una nariz enorme, y unos pies mayores. Parece un hobbit pero en gigante.
"Ama... esa mujer ha salido del seto..." le digo.
Mi VM ve que se acerca y baja la ventanilla. Le saluda. Mientras yo miro hacia atrás del coche. De pronto veo que del seto de atrás sale otra chica, más joven, vestida con un vestido negro y zapatos, y una copa de vino en la mano. Cruza el camino y va hcia el otro lado. YO no entiendo nada. Mientras mi VM parece haber descubierto que la Hobbit es la dueña de El Sol!!! Yo bajo y se lo voy a decir a mi HP , que se encuentra meando en El Sol, y a mi HT, que está sacando fotos del otro sol.
Llego a un camino y veo a la del vestido con otra vestida de andar por casa. Me saludan:
"Hello!!! Welcome to EL SOL!!!!!!!!!!!" me dicen desde lejos.
Yo me paro en seco.
"Ok!!!!!.... I'll go to get my luggage!!!" les digo para hacer tiempo antes de saludarles, parecen piradas.
Vuelvo a el coche y me encuentro a mi VM abrazándose a la Hobbit. Yo pienso en lo exagerada que es, ha costado encontrarla, pero abrazarla así... Les alcanzo y la hobbit se gira hacia mí.
"¿Tú eres Javier?"
"eh....¿si?" respondo dubitativo.
"A ti no te he abrazado!!"
Yo pienso: "¿¿y qué??"
Entonces se abalanza sobre mí y me abraza como pocos lo han hecho. Así a lo bestia, como si fuera sumarido y me fuera a la guerra.

En fin, que les habíamos encontrado. Allí lo delos abrazos estaba a la orden del día, porque, lo hacían todos. Esa noche, tras cenar, las demás huéspedes nos repartieron abrazos antes de irnos a nuestra cabaña. Y después las del servicio, las que hacían el desayuno. Y un cantante que vino a cantar también. Y la novia de éste también...

Una locura.